Las reformas del Primer Ministro, Narendra Modi, han traído buenos resultados para el tigre asiático, pese a que la pobreza es un grave problema que aún debe derrotar.
India goza de un envidiable crecimiento económico, que según el FMI llegaría a 7,4% este año. La cifra es completamente significativa, pues no sólo deja atrás a grandes potencias mundiales como EEUU, Alemania y Reino Unido, sino también a sus rivales emergentes como China, Brasil y Rusia.
Ese sin duda será un motivo más que celebrar en el aniversario 68° desde que el gigante asiático se convirtió en República, el 26 de enero de 1950.
La economía india se perfila además para crecer en forma exponencial, gracias a los dividendos de la administración de Narendra Modi, quien en 2017 puso en marcha la mayor reforma fiscal en su historia.
De esta forma, el FMI proyecta un crecimiento de 8,2% hacia 2022, cifra que le permitirá convertirse en la cuarta economía del mundo, donde sólo tendrá por delante a Japón, China y EEUU.
El control de precios
La inflación en ese país bordeará el 5% en 2018, según las estimaciones del FMI, pero la ambición de la política monetaria busca que ésta se mantenga en 4% de acuerdo a lo planteado por Urjit Patel, gobernador de la Reserva del Banco de India.
Eso sí, la máxima autoridad del central ha manifestado su preocupación por el posible aumento del precio del petróleo, que traería consecuencias negativas para la inflación.
El economista de la Universidad de Nueva Delhi, Pravakar Sahoo, dijo que “con medidas positivas como recapitalizar bancos del sector público, paquetes especiales para el sector de exportaciones, enormes gastos de infraestructura, esfuerzos para revivir el ciclo de inversión y medidas para mejorar el clima de inversión, como menor corrupción y un sistema más impositivo” las proyecciones de crecimiento son una real posibilidad para este año.
De todas maneras, reconoce algunas dificultades para la economía local, debido a la desmonetización de noviembre de 2016 y los impuestos sobre bienes y servicios, que en un comienzo afectaron “a la comunidad empresarial y al lado de la oferta”.
El mayor desafío
Si bien es una de las grandes revelaciones del dinamismo económico mundial, India tiene una cara más oscura y que se reparte en imágenes a lo largo y ancho de su extenso territorio: la pobreza.
Paul Sullivan, economista de la Universidad de Georgetown asegura que “millones carecen de electricidad y algunos de los elementos básicos de la vida. A India le está yendo muy bien en crecimiento, pero le queda un largo camino por recorrer para sacar a la mayoría de su gente de la pobreza y la miseria. El desarrollo de energía, agua y empleo serán claves”.
Una visita importante
El Primer Ministro, Narendra Modi, participará en el Foro Económico Mundial en Davos, que se realizará entre el próximo 23 y 26 de enero. Será el primer mandatario indio que lo haga desde 1997. Allí, donde los líderes empresariales, políticos e intelectuales debaten los grandes temas que afectan al mundo, la autoridad india tendrá la posibilidad de destacar entre sus pares, gracias a las cifras macroeconómicas que lo acompañan, pero consciente de los tremendos desafíos que aún quedan por resolver en una nación pujante, que cuenta con la fuerza de 1.300 millones de habitantes.
